Los familiares de una mujer muerta reciben correos enviados desde la cuenta de la difunta.
Un hacker se ha apropiado de la cuenta.
Los familiares de una mujer muerta reciben correos enviados desde la cuenta de la difunta.
La vida virtual sobrepasa los límites de la existencia física y este caso lo demuestra. Cassie Woods murió en septiembre de 2009 y dos años después sus hijas siguen recibiendo correos desde la cuenta de su madre. Al parecer, un hacker se ha apropiado de la cuenta de la fallecida y con un humor sarcástico mando 'spam' de Viagra a las chicas que todavía viven el dolor de la pérdida, enfrenta una batalla burocrática para cancelar la cuenta de correo.
EFE 7 de diciembre de 2.011. Paula Chase falleció el 1º de octubre de 2009 en la localidad estadounidense de Stafford. Pese a no estar más en entre los vivos, el correo de Paula sigue operativo. El pasado 30 de setiembre, el correo de Paula comenzó a enviar mensajes, y desde entonces lo ha venido haciendo unas tres veces por semana, según afirma su hija, Cassie Woods.
Días atrás, Cassie concedió una entrevista a la cadena noticiosa 10 News. Sin embargo, la misma debió ser concluida por su marido Jarrod, ya que la mujer se quebró en llanto durante el reportaje.
"Me puse un poco histérica, caí al suelo llorando", refirió la mujer, que abrió el primer mail "de ultratumba" el 1º de octubre, fecha del segundo aniversario de la muerte de su madre.
Como suele ocurrir con las cuentas de correo hackeadas, el email de la fallecida Paula envía spam y publicidades falsas.
Para Cassie, los títulos de dichos mensajes, como "Soy libre ahora", "Cómo empezar una nueva vida" o "Mira lo que encontré aquí", agregan una indeseable ironía a la situación. Para colmo, muchos de los mensajes ofrecen viagra a precios módicos o sistemas para incrementar las dimensiones del órgano sexual masculino.
"Mi mamá era una mujer cristiana, y ver esos mensajes con su nombre en ellos es realmente devastador", dijo Cassie, mientras las lágrimas corrían por sus mejillas.
Pasado el primer momento de estupor y rabia, Cassie y su marido respondieron algunos de los mensajes, intentando explicar su situación al hacker que manipula la cuenta de la difunta Paula. Sin embargo, el pirata informático no se mostró sensible a los reclamos, o quizá simplemente se trate de un sistema automático sin control directo humano.
Sin embargo, la verdadera lucha burocrática comenzó después, ya que la cuenta de correo de Paula pertenece al proveedor Yahoo!, cuyas rígidas normas de privacidad han generado en el pasado situaciones similares.
Personas de todo el mundo han intentado cancelar cuentas de familiares difuntos, encontrando siempre una férrea negativa por parte de Yahoo. Uno de los casos más sonados fue el de dos jóvenes militares estadounidenses fallecidos en Afganistán. Sus familiares quisieron acceder al contenido multimedia que los infortunados mílites guardaban en sus correos. Sin embargo, Yahoo! se mostró inflexible, preservando la información de sus usuarios más allá de la muerte.
Cassie, junto a sus hermanas y su padre, realizaron gestiones ante el departamento de atención Al cliente de Yahoo! "¿Están bromeando?", fue la respuesta del funcionario, quien luego les indicó que necesitaría una copia autenticada del certificado de defunción de Paula, aunque en ningún momento informó cómo hacerle llegar el documento.